Puede que Lady Gaga sea la artista más sonada de los últimos tiempos, pero eso no significa que pueda escapar a la vigilancia de su madre. Cynthia Germanotta, de 56 años, va a acompañar a su hija en su próxima gira para controlar sus excesos. Al parecer, está preocupada por la salud de Stefani y quiere asegurarse de que su retoño se alimente bien y no exagere con el alcohol.
Así lo explicaba una fuente cercana a la cantante en declaraciones al diario The Sun: "Gaga mantiene una relación muy tradicional con sus padres. Viene de una familia italo-americana muy protectora. Su madre cree que bebe demasiado y no come bien, así que ha decidido acompañarla y cuidar de ella." Parece ser que Cynthia tomó esta decisión tras haber asistido al caótico cumpleaños de su niña, en el que la cantante interpretó bajo los efectos de la bebida una errática versión de Born This Way y recibió una muñeca hinchable de regalo.
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